El guionista estructuró una sesión práctica aportando recursos para generar arcos de transformación y perfiles polifacéticos
Si el psicólogo David Pulido nos trae al aula las claves para construir buenos personajes coherentes desde la perspectiva del temperamento o el carácter, el guionista Carlos Molinero enfoca todos los años su taller en la construcción de perfiles desde una perspectiva dramática, enfatizando los mecanismos que logran la identificación con el espectador.
La sesión de Molinero coincide con el momento en que los estudiantes abordan la construcción de sus propios personajes en los talleres de escritura de largometraje, cortometraje y escenas de cine
Para ello, la sesión con Molinero se estructura tradicionalmente en dos partes. En primer lugar, aborda desde una lógica teórica algunos conceptos clave como las ideas de empatía, antipatía o simpatía. Posteriormente, durante la parte más práctica de su sesión, embarca a los estudiantes en un juego contrarreloj que les permite aplicar y desarrollar los recursos expuestos previamente.
Carlos Molinero ha escrito y dirigido Salvajes (ganadora de un Goya al mejor guion adaptado), o Cosas que hacen que la vida valga la pena. En el ámbito del documental es co-responsable de la dirección de La niebla en las palmeras. En televisión ha trabajado como guionista en series como: El comisario, La Fuga, Las aventuras del capitán Alatriste, 3 caminos, Fugitiva o Cuéntame cómo pasó, entre otras.
Su sesión se engarza con la de Pulido precisamente en el momento en que los estudiantes abordan la construcción de sus propios personajes en los talleres de escritura de largometraje, cortometraje y escenas de cine, logrando así acercar de manera directa la visión teórica con la práctica del oficio de guionista.